Como era mi costumbre en las mañanas, salí a trotar, en esta ocasión me adentre en el bosque, porque me gusta explorar lugares nuevos mientras troto. En el recorrido me encontré a campesinos muy extraños con caras muy seria, pero en sus ojos pode ver como el miedo se apoderaba de ellos, la verdad no le preste mucha atención a este hecho, seguí mi camino para completar mis dos horas diarias, cuando vi que el cielo de repente se estaba empezando a tornar de negro yo pensé en devolverme a mi hogar, pero decidí seguir trotando.
A lo lejos vi una enorme mansión de madera se veía vieja y parecía no ser habitada así que decidí ir a explorarla pero cuando estaba delante de ella me dio un escalofrió que me hizo pensar otra vez en devolverme, ya me estaba dando la vuelta cuando un rayo callo muy cerca mío y se desato una fuerte lluvia, mi única opción en ese momento fue entrar a la espeluznante mansión, cuando entre note que había demasiados gusanos y cualquier tipo de insectos que pueda pensar, en ese momento pensé, cuando escampe un poco, me iré corriendo de regreso a mansión, pero cuando me asome a la ventana, no se veía nada
debido a la neblina que había, así que para no quedarme aburrido decidí explorar más afondo la mansión cogí un palo que había afuera y con cuidado de no caerme en el viejo piso de la mansión pase por la cocina y observe que había bastantes fotos de personas, pero al detallarlas bien mire que ninguna de las fotos que había allí tenía rostro parecía como si algo o alguien las allá cortado de una manera horrible seguí buscando por las gavetas de la cocina haber si me encontraba otra cosa interesante pero lastimosamente lo único que me encontré fueron ratas y muchos gusanos.
Luego vi una puerta, así que me acerque y cuando la abrí, causo un sonido tan fuerte que hizo que varias ratas se asustaran y salieran corriendo, al mirar el cuarto por primera vez, parecía normal, pero al detallarlo mejor, vi que el colchón tenía un color bastante anormal, sentí un olor horrible, que me hizo salir, subí por las escaleras al segundo piso, estas eran interminables, cada paso que daba, el suelo de madera rechinaba de una forma, que admito, me daba miedo, no tenía percepción del tiempo, sentí que había estado subiéndolas como por 1 hora, al llegar a su final.
Después de dar un respiro, vi cientos de puertas alrededor mío, lo raro es que cada una tenia un candado, que por más que intente, no pude romperlos, inspeccione el lugar, esperando que alguna estuviera abierta. Al mirar al fondo del pasillo vi una puerta de un color verde, quede impactado, porque la puerta lucia muy bien a comparación de las otras que estaban pintadas de café y en mal estado, estando al frente de esta, escuche un grito desgarrador que provenía de abajo, se me helo la sangre, escuchaba como esa cosa abría las puertas desesperadamente; estaba tan asustado, sin saber que hacer, si bajaba, me podía encontrar, así que decidí tratar de entrar en esa habitación como diera lugar, cuando levante mi pierna para dar mi primer paso, la madera crujió tan fuerte que me quede inmóvil, hubo un silencio en toda la mansión por un momento; alguien empezó a subir las escaleras rápidamente, supe que debía esconderme, gire la manija, pero no abrió, cada vez escuchaba sus pasos cerca, así que con todas mis fuerzas y con la adrenalina al 100 empuje de ella, milagrosamente se abrió, al entrar, la asegure con un armario viejo que había allí.
No encontraba manera de escapar, hasta que vi una cuerda que colgaba del techo, al halarla, salieron unas escaleras que daban hacia el ático, al ir subiendo, escuche que algo trataba de abrir la puerta, me apure para llegar, me escondí detrás de unas cajas; se me pusieron los pelos de punta cuando escuche que abrieron la escotilla del ático, escuchaba cada paso que daba y sentía que el sabia donde estaba, tenia unas ganas de gritar, pero sabía que no serviría de nada, porque estaba en medio del bosque, esa cosa estaba mirando por cada rincón del ático, por razones que aun no entiendo, no me encontró. Pienso que sintió tanta frustración, que pego un grito espeluznante que me asusto bastante, me quede allí, más o menos una hora debido al pánico que sentía, pensando que aún seguía en la mansión.
Luego de ese tiempo, salí cuidadosamente, seguro de que ya no estaba, curiosee dentro de unas cajas y hallé la otra parte de las fotos que había encontrado en la cocina, las empaque en mi bolsillo, decidí bajar para escapar de esa mansión; al abrir la puerta del cuarto, vi con asombro que no habían puertas ni candados, solo retratos de personas; de alguna forma desaparecieron, quedé en shock por un instante, baje corriendo, sentía que esos cuadros me estaban viendo, mi cabeza daba muchas vueltas y me desmaye.
Cuando desperté estaba ya afuera y la mansión en llamas, mire mi bolsillo y no tenía las fotos, eche un vistazo hacia las ventanas, las personas de las fotos me estaban viendo. Corrí a todo pulmón de regreso a mi hogar, me senté en el sofá para procesar todo lo que había sucedido, tratando de encontrarle lógica a lo que me paso, mas no pude.
Pasaron algunos años, regularmente, se perdían cosas de la mansión, no preste mucha atención porque luego aparecían. Un día, cuando llegue del trabajo, hallé una carta en el buzón que decía: ¡no debiste entrar a mi propiedad, ahora entrare a la tuya y te torturare lentamente! Me dio tanto miedo que decidí irme del país, y dejar todo atrás, pero no fue tan fácil, debajo de mi puerta había una carta que decía: ¡te encontré!